BITÁCORA DE UN PERDIDO (8 de enero)

12:30 am.
El silencio se volvió una constante, estabas y no estabas, yo, esperando en la angustia de esperar, tu como estrella fugaz cayendo a tierra, y mis ojos ahuyentaban la visita del cansancio.
1:00 am.
Sin mas que decir, las visitas a tu casa no suelen ser justas, esperando que dijeras siquiera una sola palabra, el cementerio pascual es frío y tenebroso, inmutado seguí a tu encuentro sin saber que ya no estabas, te habías ido, sola, con tu alegría, tu tristeza, pero sola, seguí a tu encuentro de espaldas, mas no te halle.
6:00 am.
Días de insomnio que se asemejan a una practica habitual de cronista comercial, recuerdo tu sonrisa al pie de la vereda, tu pelo de niña serpenteante, ¿donde esta?:

8:00 am.
estaba en ningún lado, pero la quería tanto que comenzó a recrear momentos, a robar besos, a soñar de hinojos, estuvo y el también, la alcanzo, hasta donde, no lo sabia...

8:55 am
Ni una sola palabra, ni símbolos, ni signos, ni nada, el intentaba bosquejar su sonrisa, ella hacia volar su mente, al atardecer se encontraron en sentidos opuestos, sin peligro, con prisa, ausentes.......
Al salir del cuarto, el bullicio del transito mancilla la tranquilidad, es cuando el verde se vuelve marrón y la alegría tristeza...